Consumidores eléctricos automovilísticos: ¿cuánta energía consumen?

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    Los conductores de los coches actuales están habituados a tener numerosas funciones de confort y seguridad. Diversos tipos de dispositivos y prestaciones de asistencia a la conducción consumen energía y suponen un gran esfuerzo para la batería. El uso continuo de estos consumidores eléctricos de a bordo hace que conducir resulte más económico. Un consumo de 100 vatios equivale a un consumo de combustible de 0,1 l a los 100 km. Los conductores pueden prescindir de las funciones de confort si no quieren descargar la batería. Sin embargo, los asistentes y funciones de seguridad, como el asistente de mantenimiento de carril, deberían permanecer operativos incluso con un nivel de carga bajo de la batería. La reducción del esfuerzo de la batería no es en absoluto proporcional a los daños resultantes de tener un accidente por no utilizar la máxima seguridad.

     

    La seguridad es más importante

    Los desempañadores del parabrisas y la luna trasera aseguran una buena visibilidad en invierno. Estos consumen unos 120 vatios de energía. Los limpiaparabrisas permiten ver bien el tráfico. En función de su velocidad programada, estos consumen entre 80 y 150 vatios. Las luces del vehículo son esenciales para la seguridad en condiciones de oscuridad y deben encenderse oportunamente en los meses de invierno. Las luces de conducción modernas con faros LED solo necesitan 50 vatios.

     

    Energía para una conducción confortable

    La calefacción obtiene energía del motor a través del intercambiador de calor. La ventilación interior lleva el calor hasta los pasajeros y consume 170 vatios en el ajuste intermedio. En invierno, la calefacción de los asientos es una función de confort bien recibida. Funciona exclusivamente con energía eléctrica y consume 100-200 vatios. Los sistemas inteligentes controlan la calefacción de los asientos para reducir el consumo energético, apagándolos en ocasiones para ahorrar energía. El aire acondicionado ya viene incluido en todos los coches modernos. En verano suministra refrigeración y en invierno evita que se empañen las lunas mejor que el ventilador interior. Los sistemas de aire acondicionado obtienen la energía que necesitan principalmente del motor, pero también suponen un esfuerzo adicional de 500 vatios para la batería.

     

    Asistentes y conexiones

    El techo solar eléctrico es una prestación fundamental para los amantes del aire fresco. Para abrirlo y cerrarlo, su motor necesita 200 vatios. Los elevalunas y cierres centralizados son controlados por servomotores que necesitan 150 vatios. Con todo, solo se utilizan unos pocos segundos. No ocurre lo mismo con el mechero, que suele utilizarse como cargador de smartphones o para hacer funcionar otros dispositivos. A pesar de ello, con un consumo de 50 vatios, su demanda de la batería es modesta.

     

    Unidades y dispositivos de control eléctricos

    El motor de arranque es el mayor devorador de energía de un coche pero, sin él, nada funciona. Un gran número de intentos de arranque agota la batería, sobre todo si esta es antigua y no se le da un buen mantenimiento. El ventilador del radiador se activa cuando el motor se sobrecalienta, por ejemplo, en atascos durante el verano cuando no hay corriente de aire. El ventilador toma 800 vatios de la batería. En los vehículos modernos, el controlador del motor regula y vigila importantes funciones del motor. La gestión del motor mejora la eficiencia y la compatibilidad medioambiental de todo el sistema de tracción, y ello con un consumo máximo de 200 vatios. Algunos coches tienen sistemas de lavado de faros. Si se utilizan luces convencionales H7, se necesitan más de 100 vatios para todo el alumbrado del vehículo.

     

    Baterías AGM: una central eléctrica para los coches actuales

    El número de consumidores eléctricos que incorporan los coches crece continuamente. Debido a esto, cuando se lleva el coche al taller para una reparación o un cambio de neumáticos, los conductores deberían pedir que se revise la batería. Con una batería de alto rendimiento se dispone de energía suficiente en verano e invierno para arrancar el motor y alimentar todos los consumidores eléctricos. Una batería AGM moderna ofrece las mayores reservas de energía y la máxima protección frente a averías inesperadas. Estas son capaces de soportar grandes demandas y tres veces más ciclos de carga que una batería convencional.