Ahorro de combustible con el start-stop para cumplir los objetivos climáticos de la UE

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    En la UE, los coches particulares son responsables de alrededor del 12 % del total de emisiones perjudiciales para el medio ambiente. En 2007, el Consejo Europeo presentó un concepto destinado a reducir de forma sostenible el consumo de combustibles y las emisiones asociadas a este. La normativa adoptada que regula los coches particulares recurre a diversas medidas para conseguir el valor objetivo. Ente ellas se encuentran los refrigerantes ecológicos para los equipos de aire acondicionado, así como equipar los vehículos con faros LED de ahorro energético. Otra tecnología importante para reducir las emisiones de CO2 son los sistemas start-stop automáticos.

     

    Los primeros sistemas start-stop: los comienzos siempre son difíciles

    Ya a principios de los setenta, Toyota fue el primer fabricante de automóviles en presentar un sistema start-stop para responder a la crisis del petróleo. La idea: los sistemas start-stop automáticos ahorran combustible y, por lo tanto, dinero. Se trataba de una idea razonable en vista de la subida de los precios de la gasolina y el gasoil provocada por la crisis del petróleo. VW y Audi tampoco tardaron en reconocer las ventajas del sistema start-stop y presentaron un sistema start-stop semiautomático a principios de los ochenta. Sin embargo, al no ser bien recibidos por los clientes, los primeros sistemas start-stop desaparecieron pronto del mercado.

    No fue hasta el cambio de siglo cuando los principales fabricantes volvieron a abordar esta tecnología y a continuar desarrollándola. Además de las ventajas económicas que ofrece la tecnología start-stop a los conductores, en esta ocasión fue la legislación climática comunitaria prevista lo que provocó el resurgimiento de los sistemas start-stop automáticos.

     

    Normativa de CO2 estricta: los fabricantes de automóviles emplean tecnologías respetuosas con el medio ambiente

    La normativa europea de reducción de las emisiones de CO2 especifica que, a partir de 2021, los coches particulares solo podrán emitir 95 gramos de dióxido de carbono por kilómetro. A partir de 2025, este límite bajará a entre 69 y 78 gramos. Comparemos: en 2015, los modelos de coches emitían un promedio de 130 gramos de monóxido de carbono por kilómetro.

    Los Estados Unidos y China también tienen intención de reducir sus emisiones de CO2 en los próximos años. Mientras que las emisiones de CO2 en los EE. UU. en 2015 fueron de 163 gramos de dióxido de carbono por kilómetro, en 2021 este valor debería ser de apenas 124 gramos. El objetivo para 2025 es reducir las emisiones de CO2 a 99 gramos por kilómetro.

    En 2015, las emisiones contaminantes de dióxido de carbono procedentes de los vehículos particulares en China fueron de 161 gramos por kilómetro. Para 2020, este valor debería ser de solo 117 gramos por kilómetro.

    Al igual que los coches compactos, los coches deportivos y las grandes berlinas generan emisiones diferentes; el límite está en relación al parque automovilístico completo de Europa. El peso medio de todos los vehículos que tiene en su gama un fabricante de automóviles se utiliza como base para calcular el valor límite relacionado con el fabricante. Si estos valores se superan, se impondrán multas. Las innovaciones ecológicamente beneficiosas con las que los fabricantes contribuyen a reducir las emisiones de CO2 tienen un impacto positivo en el valor límite. Entre ellas están las células solares del techo y los sistemas de recuperación de energía a partir de los gases de escape.

    Menos gases de efecto invernadero con los sistemas start-stop

    La tecnología start-stop puede reportar ahorros de combustible de hasta un 15 % en función de cómo se conduzca. A pesar de ello, la eficacia del sistema depende de multitud de factores, como la zona de uso del vehículo. En los desplazamientos por zonas urbanas, el sistema start-stop automático apaga el motor en cuanto este se pone al ralentí.

    Esto no solo ahorra combustible, sino que reduce las emisiones de CO2 un 3-8 %.

     

    Curiosidades sobre el start-stop

    ¿Sabía que existen varios tipos de sistemas start-stop? Aparte de la tecnología start-stop simple, también existe un sistema con frenada regenerativa (recuperación), gracias a la cual parte de la energía cinética producida por el vehículo se transforma en energía eléctrica que después es suministrada a la batería.