Cómo prolongar la vida útil de tu batería

Tabla de contenido
     

    Cuando tienes que cargar una batería fuera del vehículo, seguir los pasos adecuadamente puede marcar la diferencia. Así, existen algunos trucos que puedes tener en cuenta para sacarle el máximo partido a tu batería VARTA.

     

    1.       Desconectar los cables

    Esto es muy importante: Desconecta el conducto del cable del  polo negativo en primer lugar, pues así evitarás que se produzca un cortocircuito entre el polo positivo y el suelo. A continuación, desconecta el cable rojo del polo positivo.

     

    2.       Comprobar el estado de la batería

     

    Si estás utilizando una batería de plomo ácido no libre de  mantenimiento, acude a un taller profesional. No revises nunca tú mismo el nivel de electrolito. Las baterías libres de mantenimiento, como VARTA AGM, EFB y SLI, no necesitan una revisión del nivel de ácido. Simplemente limpia cualquier suciedad de los conductos de ventilación.

     

    3.       Iniciar la carga

    Si tienes que extraer la batería del vehículo para cargarla, es importante que la mantengas en posición vertical. Si la batería puede permanecer en el vehículo, asegúrate de desconectar todos los consumidores eléctricos antes de conectar el cargador. Ten en cuenta asimismo que debes conectar el cargador a la batería antes de conectar este a la red eléctrica. Comienza sujetando el cable rojo al polo positivo de la batería y, a continuación, conecta el cable negro al polo negativo.

     

    4.       Detener la carga

    Cuando el cargador indica que la batería está totalmente cargada, desconecta el cargador antes de extraer los cables de la batería. De regreso al vehículo, conecta primero el cable rojo al polo positivo y, después, el cable negro al polo negativo.

     

    Vehículos con Start-Stop

    La carga de una batería AGM o EFB se realiza siguiendo los mismos pasos. No obstante, es importante que utilices el dispositivo correcto y el método de carga adecuado para cada tipo de tecnología.  Por ejemplo, algunos cargadores tienen un modo especial para cargar las baterías de gel que no es compatible con la tecnología AGM. En cualquier caso, consulta siempre la información en las instrucciones de uso.

     

    El tiempo de carga correcto.

    Cargar una batería lleva tiempo. Por lo general, entre 12 y 24 horas es un tiempo de carga suficiente. Por ejemplo, una batería estándar de 70 Ah necesita aproximadamente 15 horas para alcanzar una carga completa con un cargador de 5 A. Por su parte, una carga de dos horas solo cargará la batería al 15 %, Eso será suficiente para aumentar rápidamente el porcentaje de carga, pero no cargará completamente la batería. Para calcular el tiempo total de carga de una batería, toma el valor en Ah de la batería y divídelo entre el valor del cargador (A). A continuación, añade un 10 % para el tiempo extra que se necesita para cargar la batería al máximo.

     

    Los peligros de la carga flotante.

    Cuando utilizas un cargador automático, este te indicará cuando la batería está completamente cargada. La mayoría de los cargadores automáticos incorporan además un modo denominado carga flotante. La carga flotante significa seguir cargando una batería después de que esté completamente cargada para compensar la autodescarga a la que está expuesta. La batería de plomo-ácido es un sistema electroquímico que nunca se desconecta del todo, por lo que algunas reacciones secundarias provocan la autodescarga.

    Te recomendamos que solo utilices la carga flotante durante breves períodos de tiempo, ya que en principio estaba destinada a compensar la autodescarga natural de la batería. Algunos cargadores pueden cargar una cantidad de Ahs durante la carga flotante, un valor superior al necesario para compensar la autodescarga. De este modo, las reacciones que se producen en el interior de una batería de plomo-ácido pueden provocar un fallo prematuro.

    Por ello, para garantizar una larga duración de la batería, evita utilizar la carga flotante durante un período prolongado. Si es posible, limita el tiempo de carga flotante mediante los ajustes correspondientes del cargador. Si no vas a utilizar una batería durante un período prolongado de tiempo, te aconsejamos que realices una carga completa antes de almacenarla y compruebes su OCV (tensión de circuito abierto) de forma periódica (al menos cada tres meses) para, en caso necesario, volver a cargarla (al menos a 12,4 V).

     

    Si tienes en cuenta estas pautas, aprovecharás al máximo la potencia de tu batería y podrás estar seguro en todos tus desplazamientos.